En un mensaje claro y directo a través de sus redes sociales, Mauricio Macri, líder del PRO, intensificó la presión sobre el Gobierno Nacional respecto al reclamo de la Ciudad de Buenos Aires por los fondos de coparticipación que le corresponden. El exmandatario recordó que existe un fallo de la Corte Suprema que respalda la demanda del distrito gobernado por Jorge Macri.

“Desde antes de ser gobierno, apoyamos al actual presidente en su gestión, pero es crucial cumplir con los fallos irrevocables de la Corte Suprema”, expresó Macri, subrayando la importancia del respeto institucional y legal en el país.
El exmandatario hizo referencia explícita a la deuda pendiente de coparticipación que la Nación mantiene con la Ciudad de Buenos Aires, destacando que la ejecución de los fallos judiciales es esencial para fortalecer las instituciones y garantizar un marco de certeza jurídica.
“No tengo dudas de que el Presidente comparte la necesidad de cumplir con estas obligaciones, porque el respeto a las reglas del juego es fundamental para la justicia, el progreso y el bienestar de todos los argentinos”, afirmó Macri, señalando que el incumplimiento afecta directamente las capacidades de inversión y desarrollo del distrito porteño.
El mensaje de Macri se produce en un contexto de tensiones crecientes entre el gobierno de Javier Milei y la administración central, especialmente después de que el jefe de gabinete de Jorge Macri, Néstor Grindetti, hiciera hincapié en la importancia de restituir los fondos recortados según lo estipulado por la Corte Suprema.
A fines de 2022, la Corte Suprema determinó que la Ciudad de Buenos Aires debía recibir un porcentaje mayor de coparticipación, una decisión que hasta el momento no ha sido plenamente implementada según las demandas del fallo judicial.
“La Ciudad está perdiendo significativas sumas mensuales debido a este incumplimiento”, señaló Grindetti, enfatizando la necesidad urgente de resolver esta disputa financiera que afecta las arcas porteñas.
En conclusión, Mauricio Macri reiteró la importancia de un gobierno que no solo promueva nuevas leyes, sino que también cumpla rigurosamente con las normativas existentes, especialmente aquellas ratificadas por la máxima instancia judicial del país.